25.5.08

Desafectado


Recuerdo que en mi época de estudiante a jornada completa me hacía a menudo a mí mismo la promesa de que si algún día dejaban de afectarme ciertas cosas me retiraría a un lugar solitario tipo Palacio del Potala en el Tíbet para castigar con la soledad mi indolencia ante la vida.

Bueno, de eso hace mucho. Y el río no es el mismo río y lo único que permanece es el cambio. He cambiado, que es lo más natural y beneficioso para el ser humano, y ahora mismo estoy en un punto de completa indiferencia. Eso no implica que me convierta en un despechado que urde su venganza contra el mundo (qué poco sirvo yo para eso...), pero sí en algo quizá más dañino: una persona a la que le importa todo tres pimientos.

No me apetece ir a clase, mover un dedo por salvar una amistad que se viene abajo, dar los buenos días a quien no lo merece, hacer favores desinteresados a personas interesadas, sentir compasión por las circunstancias ajenas que la otra persona se ha buscado ella solita, llorar cuando veo a otro hacerlo, hace aprecio a quien merece desprecio y una larga lista de cosas que me pueden hacer ganarme la indiferencia de más de uno (cosa que, dado mi estado, tampoco me importa).

Se me pasará, lo sé. Pero de momento es lo que hay y me niego a obligarme a lo contrario. No me viene mal una temporada así, sin sufrir por hacer el esfuerzo de salvar diversas situaciones que se vienen abajo o por el daño de darme de cabezazos contra la pared.

Sigo con las aventuras y desventuras de la Gautier y parece que estoy mimetizando su comportamiento porque me resbala todo cosa fina.

No se encuentran entre ese tipo de cosas las circunstancias de mis buenos amigos, eso está claro. Pero sí las de todas esas personas satélite o grano en el culo de cuya vida no debería importarme más allá de una conversación de ascensor y cuyo abandono no debería producirme nunca más un miedo atroz.

A partir de ahora, los que estén serán los que serán y no al revés.

11 comentarios:

Ana dijo...

Ays niñooooo....

Todo son ciclos ... pero eso, ya lo sabes.

Cuando me toca un ciclo de esos de todo me da igual, soledad, apatía, falta de empatía, indiferencia ... trato de bailar a su ritmo (sin resistencia) ... creo que lo mejor es disfrutar de esa soledad dejándose acunar por la melancolía ... en ese estado de cuasiletargo y desencanto con el mundo, siempre se encuentra algo (en todo siempre hay un algo que aprender).

Besinos (que no indiferentes).

Ana dijo...

COmo me gusta el dibujo ...

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo con Ana.

Y no te inquietes, hay que hacer lo que a uno le pide el cuerpo en cada momento.

Esta semana, un Chabrol y tiramos huevos a la pantalla o urdimos más de un crimen?

Anónimo dijo...

¿ Sabe? Tengo ya muuuucha gana de tomarme un café a su lado y hablar de todas estas cosas y más.
A veces los blogs se kedan demasiado pekeños...

mariett dijo...

Hoy el poder de la imaginación me ha permitido entrar en tú alma de artista y ha conseguido contagiarme de tus sentimientos.Eso me ha sucedido con tú ilu de hoy, eso me sucede siempre que dibujas...muchas gracias, Cosi.:D)

Y ahora en serio, el bochornoso chikichiki no habrá tenido nada que ver en todo esto,no?????

Cosimo dijo...

Ana, tomo nota de todo lo que dices. Este post no tiene un tono negativo, lo que trato de dar a entender precisamente es que no hay que oponerse a los momentos "me la refanfinfla todo" porque, como muy bien dices, siempre se encuentra algo. Y por eso escribo sobre ello, ya que no hay por qué ignorarlo.
Me alegra que te guste el dibujo!
Pon la cara: muuuak!

Por cierto, te presento a Tb97 (el de abajo), de lo mejorcito que se puede encontrar dentro y fuera de la blogosfera. ;D


Superati, si no nos gusta, no la tomemos con Chabrol que está viejuno y además es prolífico, que eso ya no se lleva!


MM, no encontraría placer mayor que el de tomarme un café contigo! No dudes ni un solo momento en llamarme cuando pises Madrid y te comento lo que significa para mí lo que escribes en todos los sentidos, eso sí, sin dejar que tu blog te eclipse, que tiene que ser usted una persona de las que hay pocas.
Un besazo!

Marietta, siempre consigues emocionarme... ¿Y de verdad me das las gracias tú a mí? Jajaja, eres la única que ha visto ilusión en mi post! Y es que la hay. Vales mucho guapísima, te lo digo yo.
Pues huí de Eurovisión y, más que el despropósito del chiki chiki, lo que me afectó horriblemente es saber que Francia estuvo representada nada menoss que por Sebastien Tellier, que es un músico con mayúsculas!! Entonces, la vergüenza ajena de nuestro representante invadió mi cuerpo impidéndome dar un solo paso...

El guerrero del antifaz dijo...

Hola, me he entrometido en tu casa, que me gusta. ¿Quién no ha intentado alguna vez que lo que ocurre fuera nos pase desapercibido? A veces el dolor se encuentra dentro y qué difícil es desterrarlo. Un abrazo.

Cosimo dijo...

Guerrero, sé muy bienvenido! pasa, pasa...
Yo intento que las cosas tontas de la vida me resbalen pero, como tú dices, debe de haber algún desajuste interior que me lleva a tomármelas a la tremenda. Por eso estoy tan feliz en este estado de indiferencia total!
Un abrazo para tí!

Anónimo dijo...

Me alegra que tu estado de ánimo y de ser siga siempre en ebullición. Como bien se ha dicho, supongo que son etapas, y que hay que pasar por ellas. Yo lo veo también como un paso más para la madurez y para hacernos un poco mayores y también más sabios.
Yo te veo muy sabio (como siempre), entre otras cosas, y me alegra saber que puedas discernir tan claramente lo que te apetece y lo que no.
Ahora me comprenderás un poco mejor cuando desde hace algunos años me quedo con los amigos de verdad, los que importan y dan sentido a mi vida, y soy un poco más indiferente con lo que no me aporta mucho.
Bienvenido.
Un beso enorme.

Anónimo dijo...

Hola! Entré a este blog por "accidente"-que no los hay- y me apetece decirte mi opinión: ese estado en que te encuentras es, a mi juicio, síntoma de que estás madurando. Yo no lo veo negativo, todo lo contrario. Hay un dejo de sensatez. No tiene sentido dejar que las circunstancias fortuitas nos alteren, nos amarguen, nos incomoden. El mundo es eso, no? diversidad y hay que aceptarlo como viene, como es. Y amigos y familia... claro, los primeros los elige uno, así que a correr con la responsabilidad -por llamarlo de alguna manera- de nuestra elección. La familia? pues qué le vamos a hacer! Hay de todo como en botica y toca apañarse. Encerrarse en sí mismo, vivir vida de ascensor...buena metáfora en algunos casos, la mayoría. Es que esto de madurar es lo que tiene: se vuelve uno selectivo y eso está bien. ¡Que para eso estamos en este mundo, para ser felices, cada uno a su manera! Somos seres sociales inmersos en una desenfrenada zoociedad y cada uno a su ritmo.
Buen día. Estupendas recomendaciones de lectura y cine. Gracias.
Medea.

Cosimo dijo...

Medea, me encanta tu enfoque. Quizá sea sensatez, como muy bien dices, lo que estoy experimentando. Uno ya no es un crío y se tiene que hacer responsable de sus propios sentimientos.
Un abrazo y gracias por tu comentario.